Entradas

Mostrando entradas de octubre, 2018

¡OH, SABIO INCONSCIENTE!

¡Oh, sabio inconsciente! Aterra pensar que puedo saber. Tiemblo, concibiendo ideas de Suposición después de prever Que se va la vida en sinrazones. Sin la antología de la brevedad Me permito crear una tabula rasa Que emancipe cierta personalidad A la vez que oculta mi ignorancia. No sé si sé. No tengo la plena seguridad De poder recordar que alguna vez Algo hubiera sabido. Falta habilidad, Ciertamente, para entender o esconder La fragilidad de esta furiosa necedad Que me obliga a callar en nula sensatez,  En la que se esconde la parca memoria Y me castiga sin creatividad o altivez. Deseo entender lo que en frente tengo, La clave para preguntar, justificar, Responder ¿cuál es? ¿Cómo obtengo Alguna pizca de fuente de sabiduría? ¿Tengo paciencia o sé escuchar? Creo Que no; pero creo que hago bien intentando Luego de fracasar. "Persiste" una voz recreo Para no rendirme cuando me siento fracasado. No soy sabio, ni erud

Desvanecido

Desvanecido No se oculta, está ahí con su luz. Por su culpa los ojos perdieron las pestañas. Ni reina sola ni esconde su cruz. El sol me hablaba para mostrarme la luz que nunca antes había visto a causa del cansancio o de la oleada de encierros forzosos o por poner mis ojos en una sola cosa a la vez. Me molestaba un poco porque, si no estás acostumbrado a llevar los sentidos a las cosas que importan, puedes resultar incomodado por la forma en que se dirige el mundo hacia ti. Sí, el mundo -o lo que sea que signifique lo que está más allá del cuerpo y su sombra- me había gritado un par de veces antes; pero suelo tener la atención puesta, tan fijamente, en lo que el tono de mi voz precede. Mi voz y yo, yo y mi voz sin que nada más inquiete nuestra interacción. El sonido y su luz sin mis ojos ni las cavidades de mi cráneo con su masa buena. Mi madre habría dado por supuesto que <necesitaría lentes para evitar la molestia de la luz> y yo habría objetado cualquier recom